¿Cómo preparar a su gato para la mudanza?

Afortunadamente, existen maneras de hacer que la experiencia sea menos estresante para su minino. Un error habitual que cometen los dueños de gatos es llevar al gato repetidas veces a la nueva casa para habituarlo al nuevo entorno. El gato es un animal rutinario que se apega a su entorno. Por eso es preferible hacerle pasar por un único cambio de rutina y entorno, para que pueda adaptarse y volver a crearse una rutina. Por esta razón, debe evitar los cambios de areneros (bandejas y granos de arena) y de alimento (cuencos y alimento) durante la mudanza. Un cambio a la vez es suficiente.

El día de la mudanza, prepare una habitación en la nueva casa en la que su minino pueda adaptarse sin ser molestado por el personal de mudanza. El baño suele ser el mejor lugar. Colocar un pequeño cartel en la puerta recordando que no se debe dejar salir al gato de esa habitación siempre es buena idea.

Cuando el gato llegue a esa habitación, coloque el arenero en un rincón y el agua y el alimento en el rincón opuesto con su manta y juego preferidos. Aproveche para esparcir un poco de golosinas por todas partes. ¿Por qué golosinas? Porque es un poco como si, luego de su abrupta llegada a su nuevo hogar, usted encontrara dinero esparcido por toda la casa. Sin ninguna duda su nueva casa le parecerá un poco más acogedora.

Antes de dejar salir al minino del baño, hay ciertas precauciones que deben adoptarse. En primer lugar, debe asegurarse de que todo el alboroto de la mudanza haya terminado, que los encargados de la mudanza y las personas que su gato no conoce se hayan ido. También es necesario que la mayoría de los muebles estén ubicados en donde planeó colocarlos. El objetivo es no cambiar demasiado la configuración del territorio durante los días siguientes a la llegada de su minino a la casa. En el mismo orden de ideas, intente ordenar lo más rápidamente posible la vivienda. Asegúrese también de que no haya huecos o lugares en los que su gato pueda esconderse y que puedan resultar inaccesibles para usted.

Otro consejo antes de dejar salir a su gato: tome una de esas mantas con su olor y frótela en los rincones de las paredes, puertas y otros lugares en los que el gato podría restregarse. Cuando su gato explore la casa y reconozca un poco de su olor en todas partes, es posible que se diga a sí mismo: ''Bueno, realmente ya no me acuerdo, pero parece que ya vine aquí y me sentí a gusto. ¡Esto me tranquiliza!'' Una vez más, ¿por qué no distribuir golosinas por toda la casa, para lograr que la exploración sea más motivadora? Preparar un festín (comida en lata, atún, etc.) y dejar el cuenco en la cocina también sería una buena idea, ya que, cuando su gato encuentre el cuenco sería como si usted encontrara una valija con un millón de dólares en su nueva residencia. ¿Qué tal? Interesante, ¿no es cierto?

Si se muda de un apartamento a una casa, es mejor limitar los límites del territorio de exploración del minino, ya que ciertos gatos podrían sentirse ansiosos ante un entorno demasiado grande, en el que les resulta difícil explorar y controlar. Bloquear el acceso al sótano suele ser una buena idea durante los primeros días.

Evite cometer el error de seguir a su gato en sus primeras exploraciones. Si lo sigue, su gato podría preguntarse: ''¿Por qué mi humano me está siguiendo? ¿Hay algo peligroso en alguna parte de lo que deba protegerme?''

Finalmente, el juego también es un buen medio para relajar a su gato cuando está explorando. Una vez más, se trata de un refuerzo positivo y de una asociación positiva que, para usted, serían el equivalente a pensar: ''Bueno, es cierto que tuve que mudarme en circunstancias desagradables y fuera de mi control, pero pensándolo bien, con el dinero que encontré por todas partes en la casa, la valija con un millón de dólares y un parque de atracciones solo para mí, ¡podría acostumbrarme fácilmente a este nuevo hogar!'' 

¡Feliz mudanza para toda la familia!

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