5 min.

Cómo elegir el gato ideal para uno

Es muy difícil resistirse a la belleza de un gato y en especial a la de una cría. Los estudios incluso han demostrado que tenemos una predisposición genética a que los gatitos nos parezcan mucho más lindos que gran cantidad de otros animales. La simetría de la cara y el tamaño de los ojos en relación con su figura serían en gran medida responsables de que caigamos rendidos ante ellos (los dibujos animados japoneses estilo Manga lo comprendieron perfectamente).

Las maneras inadecuadas de elegir un gato

Esta predisposición lleva a mucha gente a perder el control cuando llega el momento de adoptar un gato, basándose únicamente en el color o en la belleza para seleccionar al compañero que pasará los próximos quince a veinte años de su vida con ellos. Usted duda si esa es la manera adecuada de elegir a su mascota. Por otra parte, puede que le sorprenda descubrir que se ha probado científicamente que el color de pelo no determina en absoluto el carácter de un gato. Asimismo, hay muy pocas diferencias de carácter entre un macho y una hembra una vez que están castrados. En síntesis, el color y el sexo no deberían ser criterios de selección importantes para elegir su gato.

Otra manera utilizada a menudo para elegir un gato es echarle el ojo al primero que se acerca a nosotros. Muchos justifican este método diciéndose a sí mismos que es el gato el que va hacia la persona que le agrada más. Algunos llegan incluso a creer que se trata del destino. No solo no es el método adecuado, sino que el gato que se le aproxima primero podría perfectamente tener un carácter completamente opuesto al del gato más conveniente para usted. En ese caso ni usted ni su nuevo compañero se sentirían muy contentos.

Los tipos de carácter

Al igual que nosotros, cada gato tiene su carácter particular. Cuando llega el momento de elegir un gato, lamentablemente no tenemos la oportunidad de conversar con él como lo haríamos con una persona para determinar sus gustos, sus costumbres y su nivel de tolerancia frente a las diversas situaciones de la vida. Conocer estas respuestas nos permitiría saber rápidamente si nuestra personalidad y la del gato combinan. ¿Cómo evaluar esta compatibilidad de carácter sin recurrir al diálogo?

Para simplificar las cosas y ayudarle a comprender, vamos a separar a los gatos en tres categorías distintas. Obviamente se trata de una categorización arbitraria, dado que el carácter de un gato es en realidad mucho más complejo como para poder resumirse en tres categorías. Comencemos por el aventurero: este gato suele ser el primero de la camada que sale del nido familiar, el primero en explorar, en trepar al árbol para gatos, en subirse a las cortinas y caer con ellas. Luego tenemos al curioso: a menudo seguirá al aventurero, pero mostrará mayor prudencia. Analizará la situación antes de lanzarse, pero una vez convencido de que no hay ningún peligro, ya no dudará. Finalmente, tenemos al tímido: es el último en asomarse cuando ocurre un acontecimiento un poco estresante. Será un poco más temeroso que los otros y se tomará su tiempo para acercarse a una nueva situación o a un individuo que no conoce.

Qué tipo de gato es ideal para mí

Ahora que ya establecimos los tres principales tipos: el aventurero, el curioso y el tímido, es más fácil elegir el gato que se adaptará a su ritmo de vida y a su entorno. Si usted tiene una familia con dos hijos y dos perros y hay mucha actividad en el hogar, un aventurero será el más indicado. Podrá gastar su energía jugando con los niños y verá a los perros como un aspecto más de su vida por descubrir. Sin embargo, ese mismo aventurero pasaría rápidamente a ser muy desdichado con una abuelita que vive sola inmersa en su rutina. Además, la abuela podría fácilmente exasperarse frente a la curiosidad y la energía que demuestra un aventurero. Un gato tímido sería una mejor opción para ella, dado que será tranquilo, buscará la seguridad y se acurrucará seguido contra ella. Imagine ahora a un gato tímido en la familia numerosa y activa. Le costará mucho adaptarse y a menudo se mantendrá alejado ante tanta acción. Será tan desdichado como los niños que no lo verán nunca y no podrán jugar con él. Finalmente, el gato curioso sería recomendable para una pareja que lleva una vida tranquila, pero activa.

Volvamos al método de elección inapropiado: elegir al primer gato que viene hacia nosotros. Habrá adivinado que ese gato probablemente sea el aventurero. ¿Realmente es el tipo de carácter compatible con su ritmo de vida? Puede que no. Suele ser bastante fácil saber a cuál de las tres categorías pertenece un gato cuando lo encontramos. No obstante, hay que darle un poco de tiempo al gato para que se adapte a nosotros. Suele necesitarse un mínimo de quince minutos solo con él para comenzar a ver emerger su verdadero carácter, lo cual es más difícil de conseguir si el entorno es estresante, como sucede en un refugio, en especial si no hace mucho tiempo que el gato está allí. De ser el caso, la persona que trabaja en el refugio o el criador seguramente podrá informarle sobre la personalidad del gato.

Último pequeño truco importante: le aconsejamos ir acompañado de un amigo cuando vaya a elegir su gato. Previamente le habrá informado a este amigo el tipo de carácter que busca y su amigo será responsable de llevarlo por el buen camino si usted llegase a perder la cabeza por la hermosa carita de un gato cuyo temperamento y necesidades no se adaptan del todo a las suyas. No olvide que el color y la belleza son efímeros y no construirán las bases de una convivencia armoniosa entre usted y su gato por los próximos quince a veinte años.

¿Encontró al candidato adecuado?

Vea cómo presentarle su nuevo entorno con suma delicadeza.

16-12-2019